
TU ROPA ES TU SEGUNDO FENG SHUI
Hola hola AAINERS,
La semana pasada leí un artículo sobre feng shui y es que yo siempre lo había asociado con los espacios que habitamos, de hecho hay muchos de sus principios que aplico en mis proyectos de interiorismo y en mi propia casa: la colocación de espejos en sitios estratégicos, el uso del color, todo para permitir que la energía fluya. Pero nunca había considerado que también puede aplicarse a algo tan cotidiano como la ropa.
Al final, el primer espacio que habitamos cada día no es nuestra casa, sino nuestro cuerpo. Y la ropa es la capa que lo envuelve, el campo energético visible que nos acompaña a todas partes.
Nuestra ropa es nuestro segundo feng shui.
Es tu campo energético visible, lo que va contigo a todas partes.
Vestirse con cuidado atrae nuevas energías
En la metafísica oriental existe la creencia de que cuando nos vestimos con cuidado, no solo nos vemos mejor, también abrimos la puerta a que lleguen a nuestra vida personas y oportunidades valiosas. No es algo mágico ni literal, sino un recordatorio de que la forma en que nos presentamos al mundo comunica respeto, intención y apertura.
Piensa en un empresario que elige un traje nuevo para reunirse con un cliente importante. No lo hace solo por protocolo, sino porque sabe que su ropa transmite seguridad, confianza y profesionalismo. Lo mismo pasa en lo cotidiano: cuando eliges una prenda que te hace sentir fuerte, el mundo te percibe de esa manera.
La ropa vieja arrastra la suerte vieja
Otra enseñanza de la metafísica oriental dice que la ropa que ya no usamos conserva la energía de etapas pasadas. Guardar prendas que no reflejan quién eres hoy puede convertirse en un ancla. Soltar lo que ya cumplió su ciclo es una forma de abrir espacio para la renovación.
Así como no acumulas desorden en casa, tampoco es bueno acumular ropa que ya no vibra contigo. Dejar ir es también un acto de confianza en lo que está por venir.
Vestir con intención
Vestir es mucho más que cubrirse: es elegir desde dónde quieres habitar el día.
- Colores suaves para atraer calma.
- Tonos intensos para proyectar fuerza y determinación.
- Prendas cómodas y fluidas para que la energía circule libremente.
Cada prenda puede ser tu propio ritual.
Y es que yo personalmente creo que la ropa no solo es diseño: es energía, movimiento y acompañamiento. Por eso en AAIN cada set está pensado para que te sientas cómoda, segura y en sintonía con la vida que quieres crear.
Porque tu cuerpo es tu primer hogar.
Y tu ropa, tu segundo feng shui.
🖤 Kat
