EMPODÉRATE A VENCER EL ESTRES
El otro día leía que las mujeres somos más propensas a incrementar y mostrar signos más agudos de estrés que los hombres.
Y como no serlo? Si somos auténticas maquinas de gestionar tantos frentes a la vez que no nos da tiempo ni de pensar en nosotras mismas, porque se nos ha educado en una sociedad que premia el estar muy ocupadas como símbolo de éxito y el ser super mujeres pulpo, como medida de nuestro valor.
Entonces, ¿cómo podemos trabajar para cambiar esta dinámica, elevar nuestro bienestar y empoderarnos a encontrar una vía para aliviar el estrés?
Estos son tres consejos muy fáciles con el que podemos conseguirlo:
1) Cuídate primero antes que nadie
Tienes que cuidarte a ti mismo antes de cuidar adecuadamente a los demás. Como mujeres, tendemos a priorizar a los demás antes que a nosotras mismas, pero debemos aprender a cuidarnos antes de ayudar a los demás.
Por ejemplo, en el avión, se te dice que te pongas la máscara de oxígeno, antes de ayudar a los demás. Pues en la vida diaria deberíamos aprender a aplicar lo mismo.
Ponerse primero generalmente significa que tienes en cuenta tus propias necesidades y sentimientos, así como las de los demás, pero partiendo desde un lugar consciente en el que tienes claro lo que es mejor para ti, siempre sin causar daño a los demás.
2) Valora las relaciones que tienes y nutrelas mucho
Cuida tu vida más que tus listas de deberes diarios. Concéntrate en tus relaciones y conexiones con las personas. La comunicación es clave para cualquier relación sana. Si quieres que tus relaciónes prosperen, debes ser capaz de comunicarte bien. Habla honestamente cuando tengas un problema; no dejes que tus emociones se enquisten y dale a tu personas cercanas la libertad y el espacio para hacer lo mismo. Incluso cuando la conversación es difícil, deben discutir sus problemas juntos. Cuando los socios se sienten seguros compartiendo sus sentimientos, pueden generar confianza y respeto. Te convertirás en un mejor comunicador, ya que ambos practican hablar honestamente y escuchar bien. Esto ayudará a que tu relación se haga más fuerte y más profunda". Recuerda, una gran relación no es unilateral. Necesitan ser capaces de hacer cosas el uno por el otro sin nada a cambio y querer hacer esas cosas el uno por el otro.
3) Cultiva la gratitud y practicala a diario
La perspectiva lo es todo. Si bien todos sabemos que la gratitud es importante, ¿cuántos de nosotros la priorizamos en nuestros días? Tener una actitud y práctica de gratitud en tu trabajo y otras áreas de tu vida te puede ayudar a reducir el estrés y mantenerte enfocado en lo que es importante, todos los días.
La gratitud es un cálido sentimiento de agradecimiento hacia el mundo o hacia personas específicas. La persona que siente gratitud está agradecida por lo que tiene y no se siente infeliz por lo que no posee.
Y si te animas y sientes que quieres llegar un poco más allá de la gratitud, puedes empezar a reconectar con tu ser interior, con tu cerebro para entrenarte en tener pensamientos y patrones de pensamiento más felices. Esto sin duda puede hacer que te sientas más empoderada y en más control de tu vida. Lo que sin duda te ayudará y mucho a manejar desde un punto completamente diferente el estrés, pero este tema lo dejamos para otro día ;)
Feliz semana AAINERS ❤